La Asociación de Medios de Información acusa a Meta de competencia desleal y vulneración del RGPD entre 2018 y 2023.
Reclama más de 551 millones de euros por el impacto económico derivado del uso ilícito de datos para publicidad segmentada.
La defensa cuestiona la metodología usada para estimar los daños y niega que los ingresos publicitarios dependan únicamente del tratamiento de datos.
El juicio queda visto para sentencia y podría sentar un precedente clave en el ámbito del cumplimiento normativo y la protección de datos.
El juicio contra Meta queda visto para sentencia
La Asociación de Medios de Información (AMI), que representa a 83 cabeceras de prensa y agencias, ha mantenido su reclamación de 551 millones de euros contra Meta, la matriz de Facebook e Instagram, por supuestas prácticas de competencia desleal y vulneración del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).
Según la acusación, la tecnológica habría obtenido una ventaja ilícita en el mercado publicitario al usar sin consentimiento válido los datos personales de millones de usuarios en Europa entre mayo de 2018 y julio de 2023, lo que habría perjudicado directamente a los ingresos publicitarios de los medios tradicionales.
Más allá de una disputa comercial
Durante la segunda y última sesión del juicio, celebrada en los Juzgados de lo Mercantil de Madrid, la representación legal de AMI insistió en que el caso va más allá de lo económico. “Esto no es solo una cuestión de competencia desleal”, subrayó el abogado de la asociación, quien defendió que los medios de comunicación representan un pilar esencial de la democracia, y que necesitan recursos justos para poder operar con independencia.
Los peritos de AMI presentaron informes que cuantifican la ventaja competitiva de Meta en 545 millones de euros, que se actualizaron a 551 millones considerando el paso del tiempo. El cálculo se basó en un modelo utilizado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), comparando los ingresos obtenidos bajo cumplimiento normativo frente a los obtenidos en su ausencia.
Una metodología bajo escrutinio
La defensa de Meta ha rechazado tanto las premisas como la metodología empleada para estimar los daños. Asegura que el uso de datos no se limita a la publicidad personalizada y que otros factores, como la inversión tecnológica o la interacción de los usuarios, también influyen en los ingresos.
Además, ha cuestionado que el análisis no tenga en cuenta a otras plataformas digitales relevantes en el ecosistema publicitario, como Youtube o Amazon, lo que, a su juicio, distorsiona el cálculo del perjuicio económico atribuido a Meta.
Para aportar mayor claridad, el juez ordenó un careo entre peritos, en el que los expertos de AMI defendieron que la principal fuente de ingresos de la tecnológica se sustenta en el uso masivo de datos personales, y que esa ventaja no hubiera sido posible de haberse respetado la normativa de protección de datos.
A la espera de una sentencia con repercusiones europeas
El juicio ha quedado visto para sentencia y su resolución podría sentar un precedente significativo en el ámbito del cumplimiento del RGPD. No solo por la magnitud económica de la reclamación, sino porque afecta directamente a cómo se construyen los modelos de negocio digitales y cómo deben adaptarse para cumplir con los estándares europeos de privacidad.
Además, esta causa podría influir en demandas similares ya presentadas por otros medios de comunicación y operadores audiovisuales, tanto en España como en otros países europeos, que acusan a la tecnológica de haber erosionado el ecosistema mediático tradicional mediante el uso indebido de datos personales.