La inteligencia artificial (IA) ya no se desarrolla en un vacío legal. En 2025, las empresas que implementen sistemas de IA deberán cumplir con exigencias concretas impuestas por la nueva Ley de Inteligencia Artificial en España, que adapta el Reglamento Europeo de IA (AI Act).
No se trata solo de una norma técnica. Esta legislación cambia las reglas del juego en sectores como recursos humanos, sanidad, finanzas, transporte, educación o servicios digitales.
¿Sabes si tu organización deberá cumplirla? ¿Tienes identificados tus riesgos? ¿Estás preparado para evitar sanciones?
Todo comienza por conocer cómo te afecta esta nueva norma y contar con un apoyo especializado como el servicio de IAR, que permite abordar el cumplimiento legal y ético de forma clara, personalizada y sin fricciones.
¿Qué es la Ley IA en España y cómo se conecta con el AI Act?
La Ley IA España no es una norma aislada, sino la transposición y adaptación del Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial, aprobado formalmente por el Consejo de la UE en 2024.
Este Reglamento tiene como objetivo:
Garantizar una IA segura, transparente y ética.
Proteger los derechos fundamentales de las personas frente a decisiones automatizadas.
Fomentar la innovación responsable en las empresas europeas.
España ha iniciado ya el proceso de implementación nacional, que se consolidará entre 2025 y 2026. Esto implica:
Obligaciones concretas para las organizaciones que desarrollan, integran o usan IA.
Supervisión por parte de autoridades competentes (como la AEPD o entidades sectoriales).
Potenciales sanciones de hasta 35 millones de euros o el 7 % de la facturación global.
La consultoría en Inteligencia Artificial Responsable se vuelve indispensable para adaptarse a tiempo y con garantías.
¿Qué empresas estarán afectadas por la Ley IA en España?
El nuevo marco legal no solo afecta a desarrolladores de tecnología. También impacta a cualquier organización que:
Use sistemas de IA en procesos internos o externos.
Implemente herramientas de IA generativa (como chatbots, asistentes o generadores de contenido).
Externalice servicios que utilizan algoritmos automatizados.
Tenga sistemas que tomen o apoyen decisiones sobre personas (por ejemplo, en selección de personal, préstamos, puntuación de clientes, etc.).
Sectores especialmente implicados:
Sanidad
Educación y formación
Transporte y logística
Servicios financieros
Recursos humanos y reclutamiento
Seguridad, justicia y administración pública
Energía e infraestructuras críticas
Tecnología, telecomunicaciones y plataformas digitales
La clave no es si desarrollas IA, sino si la utilizas directa o indirectamente en tus procesos.
¿Qué obligaciones impone la nueva Ley de IA en España?
Las exigencias legales dependerán del tipo de sistema que utilices. El AI Act clasifica los sistemas de inteligencia artificial en cuatro niveles de riesgo, que determinan las obligaciones asociadas:
1. Riesgo inaceptable (prohibidos)
Ejemplos:
Sistemas de puntuación social por parte de gobiernos.
Manipulación subliminal o conductual de personas.
Reconocimiento facial masivo sin consentimiento.
Están totalmente prohibidos. Las empresas no podrán desarrollarlos ni utilizarlos.
2. Riesgo alto (obligaciones estrictas)
Son los más relevantes a nivel empresarial. Se incluyen sistemas que:
Afectan a personas en procesos de selección o promoción laboral.
Evalúan riesgos crediticios o aseguran personas.
Gestionan el acceso a servicios públicos o recursos educativos.
Controlan infraestructuras críticas.
Obligaciones para sistemas de riesgo alto:
Evaluación de conformidad antes de su uso.
Documentación técnica y registro detallado del sistema.
Supervisión humana efectiva.
Uso de datos de alta calidad y sin sesgos.
Transparencia sobre funcionamiento y decisiones.
Planes de ciberseguridad y gestión de incidencias.
3. Riesgo limitado (obligación de transparencia)
Aplican a sistemas que interactúan directamente con usuarios, como:
Chatbots.
Generadores de texto, imagen o audio.
Asistentes virtuales.
Debe informarse al usuario de que está interactuando con una IA.
4. Riesgo mínimo o nulo (sin obligaciones específicas)
Ejemplo: sistemas de recomendación en e-commerce o filtros automáticos en correo.
Aunque no tienen exigencias legales, se recomienda aplicar buenas prácticas de desarrollo ético y protección de datos.
¿Qué pasa si no cumples con la Ley de Inteligencia Artificial?
El incumplimiento del nuevo marco legal puede suponer:
Sanciones económicas elevadas: hasta 35 millones de euros o el 7 % del volumen de negocio.
Suspensión de sistemas en uso.
Responsabilidad civil por daños causados.
Reputación gravemente dañada ante clientes, socios e inversores.
Dificultades en procesos de licitación pública, certificación o colaboración con entidades reguladas.
Ignorar la normativa no es una opción. Y actuar demasiado tarde puede implicar rehacer sistemas enteros, cancelar proyectos o asumir costes no previstos.
¿Qué pasos deben dar las empresas para cumplir con la Ley IA?
La adaptación no es automática. Requiere un enfoque estructurado, transversal y supervisado. Aquí te explicamos cómo abordarlo desde una consultoría profesional:
1. Auditoría de uso de IA
Identificar todos los sistemas o herramientas que integren IA, ya sean propias o de terceros.
Incluye desde soluciones comerciales (CRM, HR, ERP, etc.) hasta desarrollos internos o algoritmos entrenados con datos de clientes.
2. Clasificación según nivel de riesgo
Aplicar los criterios del AI Act para clasificar cada sistema en inaceptable, alto, limitado o mínimo.
Esto determina el tipo de medidas a implementar.
3. Evaluación de impacto normativo y ético
Analizar cada sistema desde el punto de vista legal, técnico y de derechos fundamentales:
¿Influye en decisiones relevantes sobre personas?
¿Utiliza datos personales o sensibles?
¿Existe trazabilidad y supervisión?
4. Implementación de controles obligatorios
En función del riesgo, se deben implantar:
Supervisión humana y manuales de uso.
Registro de decisiones automatizadas.
Evaluaciones de sesgo y calidad de los datos.
Cifrado y medidas de ciberseguridad.
5. Elaboración de documentación técnica
Tanto para uso interno como ante autoridades competentes:
Expediente del sistema de IA.
Políticas de transparencia.
Procedimientos de revisión.
Registros de funcionamiento.
6. Capacitación del equipo
Es esencial que todas las áreas implicadas comprendan sus responsabilidades:
Dirección.
Legal y compliance.
Recursos Humanos.
Tecnología.
Atención al cliente.
La formación es clave para evitar incumplimientos por desconocimiento.
7. Mantenimiento y mejora continua
La normativa no exige solo un cumplimiento inicial. Es necesario:
Revisar periódicamente los sistemas.
Actualizar políticas y controles.
Documentar cambios y mejoras.
Casos reales donde la Ley IA impacta directamente
Estos son algunos ejemplos reales donde el nuevo marco legal tiene aplicación directa:
Una empresa utiliza un algoritmo para filtrar currículums: riesgo alto.
Una clínica usa IA para ayudar a diagnosticar imágenes médicas: riesgo alto.
Un banco emplea modelos predictivos para conceder préstamos: riesgo alto.
Una empresa de e-commerce usa un chatbot para atención al cliente: riesgo limitado.
Una universidad aplica IA para evaluar a estudiantes: riesgo alto.
Todos estos casos requieren evaluación, medidas técnicas y documentación específica.
El servicio de IAR como clave para cumplir la nueva Ley
Ante un entorno normativo complejo, contar con una guía profesional es esencial.
El servicio de IAR permite a las empresas:
Identificar los sistemas de IA en uso y sus riesgos legales.
Clasificarlos según el AI Act y las directrices nacionales.
Diseñar un plan de acción personalizado y realista.
Implementar medidas de supervisión, documentación y cumplimiento.
Formar al equipo y establecer una cultura de IA Responsable.
Todo con una metodología clara, adaptada al sector y a la madurez digital de cada organización.
¿Necesitas adaptar tu organización a la Ley IA en España?
El servicio de IAR te ofrece una solución experta, adaptada y sin compromiso para cumplir con el nuevo marco legal de Inteligencia Artificial.
Nuestros profesionales te acompañan en todo el proceso: desde la identificación de riesgos hasta la documentación técnica y la capacitación de tu equipo.
Aplica la IA con seguridad jurídica, ética y eficacia operativa.
Preguntas frecuentes sobre la Ley IA en España
¿La Ley IA ya está en vigor en España?
El Reglamento Europeo se aprobó en 2024 y comenzará a aplicarse en fases a partir de 2025. España ya está adaptando el marco nacional. Las empresas deben prepararse desde ahora.
¿Es obligatorio cumplir la ley si uso IA de terceros?
Sí. Aunque la solución la haya desarrollado un proveedor externo, eres responsable si la usas en tus procesos. Debes asegurarte de que cumple con la normativa.
¿Qué pasa si uso un sistema de IA sin saber que lo es?
No exime de responsabilidad. La Ley obliga a identificar y clasificar los sistemas utilizados. Por eso es fundamental realizar una auditoría interna o contar con una consultoría especializada.
¿Las pymes también deben cumplir esta ley?
Sí. El AI Act aplica a todas las organizaciones que usen IA, independientemente de su tamaño, aunque se prevén algunas flexibilidades para pymes. Lo importante es el tipo de sistema y el riesgo que genera.