La transformación digital del sector público y de las empresas que interactúan con él ha traído consigo una mayor exposición a los riesgos de ciberseguridad. En España, para abordar este desafío y garantizar la protección de la información y los servicios digitales, se creó el Esquema Nacional de Seguridad (ENS). Responder a la pregunta ¿Qué es el ENS? es comprender el marco legal y técnico que rige la ciberseguridad en la Administración Pública y en todos los sistemas que manejan información sensible para el Estado.
El ENS no es solo una norma técnica; es un pilar fundamental de la gobernanza de la seguridad en el ámbito público. Su objetivo primordial es generar un ambiente de confianza en la prestación de servicios electrónicos, asegurando la adecuada protección de los activos de información frente a amenazas. Esta normativa es de obligado cumplimiento y se aplica a todas las administraciones públicas (estatal, autonómica y local) y a las empresas privadas que, mediante contratos o convenios, presten servicios a estas entidades o manejen su información. La obligatoriedad y la necesidad de la certificación hacen que la comprensión y la aplicación correcta del ENS sean cruciales para cualquier organización afectada.
Definición y marco legal de lo que es el ENS
El Esquema Nacional de Seguridad (ENS) se define formalmente en el Real Decreto 311/2022, que actualizó la versión original de 2010. Este marco establece los principios básicos y los requisitos mínimos que deben regir la seguridad de la información tratada en medios electrónicos, así como la seguridad de los propios sistemas de información que la soportan. La norma opera bajo el principio de la seguridad integral, que aborda no solo los aspectos técnicos de la ciberseguridad, sino también los organizativos y procedimentales.
Para comprender a fondo qué es el ENS, es esencial reconocer su naturaleza de cumplimiento obligatorio. No se trata de una recomendación o una certificación voluntaria, sino de una exigencia legal que persigue la uniformidad de la seguridad en el sector público. El ENS exige que la seguridad se construya a partir de la gestión de riesgos, asegurando que las medidas de protección aplicadas son proporcionales a la criticidad de la información y los servicios gestionados.
Los cinco pilares fundamentales de la seguridad
El ENS se fundamenta en la protección de cinco dimensiones de seguridad, que deben ser evaluadas para cada activo de información. La correcta identificación de la necesidad de protección para cada dimensión es lo que determina el nivel de seguridad (Básico, Medio o Alto) que debe alcanzar el sistema.
Las dimensiones son:
Confidencialidad: Garantizar que la información solo es accesible por personal autorizado.
Integridad: Asegurar que la información no ha sido alterada o destruida de manera no autorizada.
Disponibilidad: Garantizar que los usuarios autorizados tienen acceso a la información y a los servicios cuando los necesitan.
Autenticidad: Asegurar la identidad de un usuario, proceso o recurso.
Trazabilidad: Garantizar el seguimiento de las acciones de un usuario para poder imputar responsabilidades.
La correcta categorización de los sistemas basada en el impacto que tendría un fallo en estas dimensiones es el primer paso para determinar los requisitos que el ENS impone a la organización.
Principios básicos sobre qué es el ENS y su aplicación
La aplicación práctica del ENS se rige por una serie de principios básicos que orientan la política de seguridad y la implementación de las medidas. Estos principios aseguran que la seguridad no es un compartimento estanco, sino una parte integrada de la gestión de la organización.
Uno de los principios clave es el de la Seguridad como Proceso Integral. Esto implica que la seguridad no se limita a la compra de hardware o software, sino que debe estar presente en todos los ciclos de vida del sistema: planificación, desarrollo, operación, y retirada. Otro principio fundamental es la Gestión de Riesgos. El ENS exige que la seguridad se fundamente en la evaluación continua de los riesgos, estableciendo un balance entre el coste de las contramedidas y el perjuicio potencial derivado de un incidente.
El sistema de categorías y niveles de seguridad
Una vez que la organización ha entendido qué es el ENS y sus principios, debe enfrentarse a la clasificación y categorización de sus sistemas de información. El ENS establece tres niveles de seguridad:
Nivel Básico: Aplicable a sistemas que manejan información cuyo compromiso tendría un impacto limitado. Requiere la implementación de 75 medidas de seguridad.
Nivel Medio: Aplicable a la mayoría de los sistemas que manejan información clasificada como de difusión limitada o cuya indisponibilidad tendría un impacto limitado. Exige un número mayor de medidas y una auditoría obligatoria cada dos años.
Nivel Alto: Reservado para sistemas que manejan información clasificada como secreta o reservada, o cuya indisponibilidad causaría un perjuicio grave o muy grave (servicios esenciales). Requiere el conjunto más amplio y estricto de controles.
La correcta asignación de niveles no es trivial. El apoyo de una consultora experta en el Esquema Nacional de Seguridad resulta indispensable para realizar una categorización objetiva y diseñar un Plan de Adecuación que cumpla estrictamente con la normativa vigente.
La importancia de la certificación y la auditoría para el ENS
Un aspecto crucial que define qué es el ENS es la obligatoriedad de la certificación para los sistemas de Niveles Medio y Alto, así como para ciertos proveedores de servicios críticos para la Administración. Esta certificación es la prueba formal de que el sistema cumple con el marco normativo.
El proceso de certificación se articula a través de una auditoría que debe ser realizada por una entidad de certificación acreditada. Esta auditoría verifica la correcta aplicación y funcionamiento de todos los controles de seguridad exigidos por el nivel de seguridad asignado (Básico, Medio o Alto) y por la Declaración de Aplicabilidad.
Las Guías CCN-STIC: La interpretación práctica del ENS
Las Guías CCN-STIC, publicadas por el Centro Criptológico Nacional (CCN), son la herramienta práctica esencial para la aplicación del ENS. Mientras que el Real Decreto establece el «qué» y el «por qué» de la seguridad, las guías CCN-STIC explican el «cómo». Ofrecen interpretaciones detalladas, plantillas, procedimientos y recomendaciones técnicas para implementar cada una de las medidas de seguridad del catálogo.
La consultora que asiste a una organización en la adecuación al ENS debe poseer un conocimiento exhaustivo de estas guías. La interpretación incorrecta o la aplicación inadecuada de una sola medida puede ser causa de una no conformidad en la auditoría y, por lo tanto, impedir la obtención de la certificación. Por ello, la elección de un socio consultor con experiencia probada en el uso de las CCN-STIC es un factor de éxito determinante en cualquier proyecto de implementación del ENS.
El Esquema Nacional de Seguridad es, en esencia, la respuesta regulatoria de España a la necesidad de proteger la información digital del sector público. No solo obliga a implementar medidas técnicas, sino que exige una cultura de seguridad integral, basada en la gestión de riesgos y la mejora continua. Comprender qué es el ENS e implementarlo correctamente no solo garantiza el cumplimiento legal, sino que fortalece la confianza ciudadana en la administración digital y protege los activos más valiosos de cualquier entidad: su información y sus servicios. La complejidad de este marco normativo hace que la colaboración con expertos sea la vía más segura y eficiente para alcanzar y mantener la certificación.
Preguntas Frecuentes sobre ¿Qué es el ENS?
¿A quién aplica el ENS?
El Esquema Nacional de Seguridad es de aplicación obligatoria para todas las Administraciones Públicas (estatal, autonómica y local). También es obligatorio para las empresas privadas o entidades que presten servicios o soluciones a las Administraciones Públicas o que manejen información sensible para ellas. En la práctica, cualquier empresa tecnológica que quiera ser proveedora del sector público deberá estar adecuada o certificada en el ENS.
¿Es el ENS lo mismo que ISO 27001?
No son lo mismo, aunque son complementarios. La ISO 27001 es una norma internacional que establece los requisitos para un Sistema de Gestión de la Seguridad de la Información (SGSI) y es voluntaria. El ENS es una normativa de carácter legal y obligatoria en España para el sector público. Si bien el ENS comparte muchos principios con la ISO 27001 (como la gestión de riesgos), el ENS tiene requisitos específicos y un catálogo de medidas de seguridad propio que deben cumplirse para obtener la certificación.
¿Cuál es el papel del Comité de Seguridad en el ENS?
El Comité de Seguridad (o su equivalente funcional) es el órgano responsable de aprobar la Política de Seguridad, supervisar la gestión de riesgos y garantizar el cumplimiento del ENS en la organización. El Real Decreto 311/2022 exige la designación formal de responsables clave, como el Responsable de la Información, el Responsable del Servicio y el Responsable de Seguridad, quienes rinden cuentas a este Comité.
¿Qué es la Declaración de Aplicabilidad (DEA)?
La Declaración de Aplicabilidad es un documento fundamental que forma parte de la documentación del ENS. Es una declaración formal, elaborada por la organización, donde se detallan todas las medidas de seguridad del catálogo del ENS que se aplican al sistema de información, justificando la exclusión o no aplicabilidad de aquellas medidas que no se han implementado. Es la base sobre la que se realiza la auditoría de certificación.